viernes, 29 de agosto de 2008

Babilonia



A orillas del río Eufrates, desde el 1800 antes de Cristo, la ciudad de Babilonia fue el centro de una cultura original que construyó grandes templos y puso la ley por escrito por primera vez.




La ciudad era propiedad del Dios Marduk que designaba, según las creencias de los babilonios, al rey para que la administrara. El rey no era considerado un ser divino como el faraón, era sólo un intermediario entre la gente y los dioses y vivía rodeado de sus colaboradores, los nobles, que lo asistían en sus tareas.




La población estaba dividida entre hombres libres y esclavos. Los esclavos podían dejar de serlo: si lograban juntar algunos bienes, podían comprar su libertad. Entre los hombres libres había pequeños propietarios de tierras y comerciantes que recorrían el territorio ofreciendo sus mercancías. Existía también la clase intermedia de los muskhenum, entre los hombres libres y los esclavos.


La Religión


Los babilonios tenían infinidad de divinidad pero algunas eran las más importantes. Los dioses se parecían a los humanos, tenían cualidades y defectos, pasiones y sentimientos. Marduk era el más poderoso de todos. Anu era el dios del cielo; Entil el dios del Aire; Ea, el dios de las aguas; Sin, la Luna; Shamash, hijo de Sin, era el dios del Sol e Ishtar, diosa del planeta Venus, era la diosa del amor, pero también de la guerra.


Ritos y ceremonias


En Babilonia no había tumbas grandiosas como en Egipto. Las tumbas eran sencillas. Los muertos una vez enterrados descendían a los infiernos donde sobrevivirán nutriendose de los vivos. Sólo los guerreros caídos en el campo de batalla podían aspirar al descanso eterno.
Los sacerdotes tenían mucho poder porque eran los únicos capaces de interpretar los mensajes de los dioses y adivinar el futuro. Muchas veces usaban la ignorancia de los demás para generar temor y aumentar su poder.


Las ciencias


Una de las formas que tenían los sacerdotes de adivinar la voluntad de los dioses era observar las estrellas. Este estudio de los astros los llevó a desarrollar la Astronomía. Así, pudieron dividir el año en doce meses y dividir los meses en semanas de siete días. Para los babilonios los días se dividían en doce partes de dos horas cada una. La astronomía y su necesidad de realizar complejos cálculos, los llevó a desarrollar las matemáticas. Su sistema numérico era sexagesimal, o sea que se basaban en el número 60 y no en el 10.

No hay comentarios: